La firma digital es una herramienta que puede ser muy importante en la empresa. Tanto, que en algunos casos marcará un punto diferencial con la competencia por todas sus posibilidades. Por ello, en este blog hemos tratado diferentes aspectos en distintos artículos, y ahora vamos a detallar para qué sirve la firma digital.

Ventajas de usar la firma digital

Uso bidireccional: esta firma puede realizarla tanto quien cuenta con el servicio como la otra parte si ha recibido el envío de documentos para la firma digital. Independientemente de si esta última dispone del servicio.

– Agilidad: ese uso bidireccional y la posibilidad de ejecutar al instante, sin necesidad de una presencialidad, permitirá ahorrar tiempo y evitará que muchas operaciones terminen por no cerrarse o haciéndolo más tarde de lo debido.

– Ahorro en costes: será posible evitar muchos gastos relacionados con material de oficina, hasta llegar a dar incluso con oficinas sin papeles. Y, en este aspecto, también habría que contar con una reducción del dispendio en transportes.

– Seguridad: la firma digital es una firma electrónica avanzada, y tiene unas propiedades de autenticidad, integridad, confidencialidad y no repudio. Estos supone todas las garantías para operar.

– Legalidad: la firma digital está reconocida por las instituciones y pueden verse los requisitos en el Reglamento eIDAS. Incluso esta firma puede llegar a ofrecer más garantías legales que la convencional firma manuscrita en papel.

¿Para qué sirve la firma digital?

Parece evidente que se puede usar para mostrar conformidad, de manera electrónica, sobre diferentes documentos. Podemos resumir para qué sirve la firma digital de la siguiente manera:

– Contratos electrónicos: cualquier tipo de contrato podrá ser firmado de manera digital, como contratos laborales, de compra-venta, de servicios, de arrendamiento, etc.

– Trámites con las administraciones públicas: las empresas, incluso en mayor medida que los particulares, deben realizar numerosos trámites con los organismos públicos. Y, con la firma digital, es posible solventarlos. Hablaríamos, por ejemplo, trámites con Hacienda o asuntos de registro.

– Transacciones financieras online y compras: ciertas operaciones requieren de una firma para poder realizarse, principalmente cuando superan cierta cantidad. Así se evitan posibles problemas de seguridad que podrían ser fatídicos. Esta firma podría servir tanto para realizar transferencias bancarias como para compras en web.

– Documentos legales y notariales: todos los documentos de este estilo deben ser firmados por diferentes partes, y todas podrán hacerlo con un sistema de firma digital.

Estos son algunos ejemplos de para qué sirve la firma digital, pero sus usos pueden ser infinitos. Para constatarlo es posible probar, con Firma Documentos, los 5 envíos gratuitos de documentos para su firma digital.